Cambiar de ciudad: consejos y razones para hacerlo
Tomar la decisión de cambiar de ciudad puede resultar difícil, ya que a muchas personas les cuesta adaptarse a los cambios y empezar una nueva experiencia de vida. Esta acción genera un cúmulo de sentimientos que invaden al individuo al saber que ya no estará en el lugar que conocía, al que estaba habituado y en el que guarda muchos recuerdos y anécdotas.
Cuando una persona decide mudarse de ciudad sabe que eso representa el inicio de una nueva etapa, pero el temor a lo desconocido puede paralizar a cualquiera porque no es fácil dejar todo atrás. En este sentido, es importante comprender el valor de las distintas razones que pueden llevar a tomar la decisión, así como algunos consejos que permiten atravesar este proceso de la mejor manera.
Razones para cambiar de ciudad
Siempre hay algún momento en la vida en el que aparece una sensación de estancamiento personal y, como respuesta, muchas veces surge la idea de mudarse de ciudad para así cambiar de ambiente, de empleo, mejorar la relación de pareja o familiar, y empezar a construir el camino hacia las metas trazadas.
Entre las razones más comunes para mudarse a otra ciudad se encuentran las siguientes:
- Nuevas oportunidades laborales: algunas veces las empresas internacionales pueden enviar a sus empleados a trabajar en otra ciudad o país. De igual manera, pueden hallarse valiosas opciones de empleo en territorios muy alejados del lugar de residencia. Ofertas de este tipo permiten avanzar profesionalmente y abrirse paso a nuevos campos y experiencias.
- Bienestar emocional: las emociones tienen un gran peso a la hora de decidir cambiar de ciudad, ya sea porque se atraviesa por una fuerte ruptura o duelo, o porque se desea mejorar una relación familiar o de pareja y brindarle una nueva perspectiva. En este caso, mudarse significa querer respirar un aire diferente, para poder avanzar y trazarse nuevos horizontes.
- Diversión: muchas personas también deciden cambiar de ciudad porque naturalmente son aventureros, y puede que en el lugar donde se encuentran sienten que todo se ha convertido en monótono. Existen ciudades que pueden brindar un gran abanico de posibilidades para el entretenimiento, disfrutar de un nuevo ambiente y conocer nuevas culturas.
- Independencia personal: querer ser independiente conlleva una gran responsabilidad, y significa buscar un propio sustento, y llevar a cabo tareas que quizás antes no se hacían con regularidad. Mudarse puede ser una opción para generar esa independencia que se desea y encontrar oportunidades que ayuden al desarrollo personal y profesional, sin dependencia de los padres o parientes más cercanos.
Consejos para mudarse a otra ciudad
Tomar la decisión de mudarse y emprender una nueva vida no será fácil en la mayoría de los casos, y menos si es la primera vez que se enfrenta ese escenario. Sin embargo, hay algunos consejos que podrán servir de guía y disfrute del proceso:
- Ahorrar: guardar dinero antes de mudarse es esencial para evitar dificultades los primeros días o semanas, o al menos hasta establecerse laboralmente. Si, por su parte, el traslado corre a cargo de la misma empresa, se necesitará tener un dinero guardado de todas formas para una variedad de aspectos logísticos. Hay que tener en cuenta que vivir en grandes ciudades implica muchos gastos porque el coste de la vida es más alto y los ahorros servirán de soporte hasta que se generen los primeros ingresos. De esta forma, se evitará caer en deudas que se hagan complejas de costear. Por supuesto, siempre será importante tener dinero en efectivo para enfrentar cualquier eventualidad.
- Escoger una vivienda: antes de cambiar de ciudad, deben buscarse las mejores opciones de alojamiento. Es recomendable buscar sitios que queden cerca del trabajo, así como de establecimientos esenciales como supermercados y farmacias, y también de lugares de esparcimiento. Aunque en el centro de las ciudades las viviendas suelen ser más costosas, y en las periferias bajan los precios, lo más importante es que la estancia sea cómoda en ese lugar.
- Ordenar los gastos: resulta importante ser muy organizado con las facturas, y cuentas por pagar para que no se acumulen y siempre mantenerse al día. Puede llevarse un documento en el que se anoten los ingresos y gastos, y así hacer un uso del dinero mucho más eficiente.
- Alimentación: al principio, cuando hay que hacer las compras, es esencial llevar solo lo necesario. Una opción es hacer una lista y planificar con tiempo lo que se desee llevar. De igual manera hay que tener en cuenta que las comidas de otras ciudades o países pueden caer mal en el estómago, en un inicio, a causa de ingredientes desconocidos que se utilizan y a los cuales no se está muy acostumbrado.
- Aprender el idioma: en el caso de mudarse a un lugar donde hablan un idioma distinto al nativo, es importante estudiar antes al menos un poco de esa lengua, de manera de conocer las expresiones más comunes al llegar a otro país, y que no se dificulte tanto la comunicación. El inglés no es la única opción, a pesar de ser el idioma universal o de uso más extendido. Los nativos de cualquier país suelen ser muy regionalistas y valorar mucho sus raíces, por lo que conocer su lengua representará siempre una gran ventaja.
Cambiar de ciudad puede ser un poco estresante al principio, pero lo importante es que se esté preparado para ese paso y que la serie de cambios que implican no pille a nadie desprevenido.