¿Cómo ahorrar con el aire acondicionado en verano?

Lectura 4 min

En verano, o cuando la temperatura aprieta, el aire acondicionado es uno de nuestros mejores aliados. Nada mejor que una habitación fresquita, nuestra bebida favorita y un buen libro para pasar una tarde agradable en la ciudad en pleno verano. Sin embargo, tener el aire acondicionado encendido todo el día supone un gasto energético y económico considerable. Existen algunos pasos que puedes dar para ahorrar con el aire acondicionado y no, no son solo utilizar el abanico. ¿Quieres conocerlos?

Ahorrar al elegir el aire acondicionado

Si decidimos instalar un aparato de aire acondicionado en nuestra casa, es indispensable saber qué tipo de modelo necesitamos para ganar en efectividad. El ahorro comienza antes de enchufarlo.

Elegir la potencia adecuada

Es esencial elegir el aparato de aire acondicionado del tamaño y potencia adecuadas para enfriar la habitación en la que va a ser utilizado. Comprar un aparato demasiado grande solo servirá para aumentar innecesariamente el consumo y, por contra, uno demasiado pequeño necesitará de más tiempo y por lo tanto un mayor gasto para lograr su objetivo.

Apostar por tecnología eficiente

El precio de un aparato de aire acondicionado varía mucho según el modelo y su tecnología, y esto afecta también de manera importante al tipo de consumo posterior. Todos los electrodomésticos tienen una escala ascendente identificando su eficiencia energética: los marcados con la letra A, los signos +++ y el color verde son los más eficientes  y, por lo tanto, ecológicos. 

Elegir un aparato con la tecnología inverter ayuda a incrementar el ahorro energético en un 40% aproximadamente. Esta tecnología mantiene la temperatura de confort elegida de manera continua. Deja el compresor funcionando a temperatura constante y evita tener que consumir energía adicional para volver a alcanzarla si se para.

Colocarlo en la posición óptima

Una de las formas de ahorrar energía con el aire acondicionado es asegurarse que este en la ubicación ideal. La ubicación interior y exterior del aire acondicionado tiene un impacto significativo en el mayor o menor consumo. Es mejor no colocarlo donde pueda estar expuesto directamente a los rayos del sol para evitar que se recaliente y gaste más energía.

Regular la temperatura

Existe una temperatura ideal diferente para todas las personas pero, a la hora de regular el aire acondicionado, es conveniente regirse por unas pautas generales. Lo ideal es mantener la temperatura interior de la vivienda, como máximo, a 8 grados menos que la del exterior. Por ejemplo, si hace 35 grados, una temperatura interior de 27 grados es suficiente para crear un ambiente agradable. Esta pauta te permitirá ahorrar en el consumo más que mantener la temperatura interior a 19 grados, independientemente de cual sea la temperatura del exterior. Los cambios continuos suponen también un mayor gasto energético. Es mejor regular y mantener la temperatura constante. 

Aisla tu vivienda

Mantener las puertas y ventanas cerradas ayuda a aislar el interior del exterior y a mantener la temperatura dentro de la habitación. El aislamiento térmico de los vanos de la vivienda y de las paredes es esencial para mantener el microclima de la casa, aunque también lo más costoso. Algún truco sencillo que puedes seguir en verano es cerrar las persianas o correr las cortinas para evitar que el sol incida directamente en el interior de la vivienda durante las horas de más calor.

Úsalo de manera sostenible

Otra de las maneras de ahorrar con el aire acondicionado es usarlo de manera eficaz. Seguir unas rutinas y hábitos sostenibles para hacer más llevaderas las horas de calor y no utilizar tanto el aire acondicionado es una forma eficaz de reducir el consumo. A primera hora de la mañana, o si hace una tarde fresquita y corre algo de viento, abre las ventanas de tu casa. Deja que la corriente renueve el aire y refresque el interior. Durante los días de mucho calor, mantener la casa en penumbras y no tener demasiados aparatos eléctricos encendidos también sirve para disminuir el calor interior de la vivienda. Evita el aire acondicionado muy bajo o apágalo un rato antes de salir de tu vivienda.

Conocer y programar tu aparato

Programa el horario del aire acondicionado y apágalo al salir o durante el horario nocturno. No solo puede ser perjudicial dormir con el aire acondicionado encendido, sino que no haciéndolo ahorrarás mucha energía. Utilizar el modo ECO, con el que cuentan muchos de los aparatos, puede también hacerte ahorrar hasta un 40%.

Mantén el aparato limpio

Un buen mantenimiento del aparato de aire acondicionado es esencial. Especialmente es necesario mantener limpios los filtros del aire acondicionado. El polvo que acumulan obliga al aparato a consumir más energía de la habitual. Límpialos al menos una vez cada 12 meses.

Usar ventiladores

Los ventiladores son aparatos eficientes para bajar la temperatura de tres a cinco grados y consumen mucha menos energía que el aire acondicionado. Utilizarlo cuando no tengas que bajar mucho la temperatura interior y solo quieras refrescar un poco el ambiente es una manera fácil y eficaz de ahorrar energía. También si vas a estar solo un momento en casa es una buena idea no encender el aire acondicionado y utilizar un ventilador. Si lo usas de manera más eficaz, lograrás ahorrar con el aire acondicionado.

Artículos relacionados